Blogia
SUPAY-666

7 tonterías Las mentiras con que quieren engañarse a sí mismos - Las mentiras que los estupidos siempre repiten al leer los diarios de 50 centimos, los que votan por keiko son los mismos imbeciles que votaron por kenyi, democracia? jajaja! ...gracias a http://puenteareo1.blogspot.com/

7 tonterías Las mentiras con que quieren engañarse a sí mismos


Todos estamos viendo el desfile: una montaña de razones con las cuales millares de peruanos intentan demostrar (y demostrarse a sí mismos, demostrar a sus propias conciencias) por qué es preferible votar por Keiko Fujimori antes que votar por Ollanta Humala. Quiero comentar algunas:

1. Dicen que con Ollanta Humala vendría el riesgo de que se atornillara en el poder, que modificara la constitución para quedarse indefinidamente en Palacio de Gobierno. Por eso, dicen, es mejor elegir a los Fujimori. Una observación: el único político en el Perú contemporáneo que modificó la constitución para elegirse nuevamente, no una sino dos veces, y encima con fraude, fue Alberto Fujimori.

2. Dicen que con Ollanta Humala se vendría un periodo de irrespeto por el orden democrático, en el que los poderes del Estado estarían sometidos al capricho del gobernante. Una observación: Fujimori anuló una constitución, escribió otra, disolvió el Poder Legislativo y colapsó el Poder Judicial, creando la única dictadura autocrática que ha existido en el Perú en el último tercio de siglo.

3. Dicen que con Ollanta Humala se vendría un periodo de prepotencia y altanería, de oficialistas violentos que nunca escucharían una crítica y que desoirían los reclamos de cualquiera que se les opusiera. Una observación: ¿no se acuerdan de Fujimori mandando al calabozo o al arresto domiciliairo a senadores y diputados democráticamente electos cuando estos se opusieron al cierre del Congreso? ¿De Martha Chávez sosteniendo que las víctimas de tortura se habían torturado ellas solas? ¿De Martha Hildebrandt haciéndole ascos a las congresistas de provincias a quienes no considera dignas de sentarse cerca de ella?

4. Dicen que con Ollanta Humala llegaría una forma de gobierno autoritario, que eliminaría las libertades individuales, comenzando por la libertad de expresión y la libertad de información. Una observación: ¿ya olvidaron que el régimen fujimorista cerró medios de comunicación, manipuló el accionariado de otros, adquirió otros más, y construyó una red de empresarios de la comunicación corruptos que publicaban, bajo sueldo, en un sistema de coimas institucionalizadas, únicamente la información que el gobierno les mandaba publicar?

5. Dicen que con Ollanta Humala sobrevendría un sistema represivo paraestatal, con persecuciones individuales, uso indiscriminado de la violencia, atentados contra la vida y la integridad física de quienes osaran oponerse a su gobierno. Una observación: ¿recuerdan qué cosa fue el Grupo Colina?

6. Dicen que con Ollanta Humala llegaría al poder un grupo de políticos lumpen y funcionarios de segundo nivel que no buscarían otra cosa que el enriquecimiento bajo la mesa, orquestando estafas, desfalcos, robos, malversaciones, hasta el punto de que el gobierno mismo se asemejaría a una mafia. Una observación: ¿saben cuántos miembros del gobierno fujimorista han sido juzgados por tribunales imparciales, siguiendo el debido proceso, y han sido encontrados culpables de delitos comunes y delitos contra los derechos humanos, con penas que van desde los 3 hasta los 35 años de prisión? La revista Caretas los enumera hoy mismo: son 78. Más que en cualquier otro momento de la historia del Perú. Eso, sin contar a los parlamentarios que se libraron con argucias legales y a los infinitos corruptos que no ocuparon un cargo público pero que fueron piezas claves del aparato fujimoirsta, como los dueños de diarios y televisoras.

7. Dicen que con Ollanta Humala se nos viene un "cachaco" que manejaría el país brutalmente, coludido con una generación de generales del Ejército que están dispuestos a apoyarlo en todo. Una observación: ¿ya olvidaron qué pasó con el Ejército durante el gobierno de Fujimori? ¿Olvidaron que los parlamentarios fujimoirstas se reunían en el Cuartel General del Ejército para pactar sus políticas en componenda con los mandos militares superiores? ¿Olvidaron que el Pentagonito se volvió un centro de torturas contra civiles, incluso contra los mismos miembros del Servicio de Inteligencia, si éstos decidían que no querían seguir siendo parte del crimen? ¿Han visto cuántos de los fujimoristas que están en la cárcel hasta hoy son oficiales de las Fuerzas Armadas? ¿Olvidaron qué cosa era Vladimiro Montesinos?

En resumen: quienes quieran decir con cierto margen de sinceridad por qué prefieren a Fujimori antes que a Humala, deberían dejarse de dar argumentos tan ridículamente disparatados, argumentos que les muerden la lengua mientras los dicen y en los cuales ellos mismos no creen en lo más mínimo.

Deberían decir que están conformes con el modelo económico actual, aunque ese modelo sea pasivo y no implique ninguna forma de solidaridad con los más pobres. Deberían decir que un poco de aparente y mediocre tranquilidad social les parece más deseable que cualquier intento de hacer que más de un tercio de la población nazca, viva y muera en la miseria escuchando durante veinte años que el Perú está cada vez mejor porque hay más empresas (que no los emplean o los subemplean y no les permiten sindicalizarse ni buscar justicia en las relaciones laborales), más centros comerciales (donde nada podrán comprar jamás), más zonas residenciales (donde ir a pedir limosna) y más restaurantes (donde no los dejarán entrar).

Y deberían decir que mantener ese estatus quo les parece más importante que la ruina moral de la nación.

O podrían hacer otras cosas: no votar, o viciar el voto, o votar por Humala y exigirle que respete aquello del país que funciona, que no sacrifique súbitamente el larguísimo sacrificio ajeno a cambio de un par de años de populismo sin sustento real.

Podrían, por una vez, por una sola vez, organizarse en movimientos con fundamento ideológico y con sentido solidario: podrían, por una vez, pensar en los que no tienen lo que ellos sí y mirarse en el espejo y pensar si es lícito que, para que ellos disfruten un mediocre aburguesamiento de comedia bufa, millones de peruanos vivan para siempre esperando la realización de promesas que jamás se cristalizan.

...

0 comentarios