Julio Polar murió un viernes 30 de Noviembre del 2012, en madrugada, pero no murió ...Articulo del Supay para ese gran hombre que se fue y que, siempre pidio que lo sigamos. In memorian al gran maestro Julio Polar.
Julio Polar murió un viernes 30 de Noviembre del 2012, en madrugada, pero no murió.
Murió dicen que hace cinco años, otros dicen que jamás morirá y que aun está alentando revoluciones y buscando la justicia, moviendo a los jóvenes a que despierten y salgan de sus caparazones de comodidad.
Dicen que aun nos espera en su casa desde esa vez que nos invito a visitarlo, pero aun no vamos y aun nos espera.
Julio Polar detestaba a los poseros, era un hombre de acción y por eso le gustaban las personas que decían algo y que luego lo llevaban a la práctica. Ahora, este hombre que tuvo muy pocos amigos en vida, ahora muerto y por esos raros milagros se ha llenado de personas que juran lo conocieron y compartieron su vida con él.
Fue Secretario General del Sindicato de Trabajadores del Diario La Prensa y siempre lucho por sus ideales, como hombre de acción fue fiel a sus principios e ideales. Julio entraba y salía de los trabajos en revistas, diarios y demás publicaciones, los jefes siempre se oponían a la fuerza de sus imágenes y a sus palabras. Me conto que para publicar un trabajo debía rehacerlo una y otra vez ante la censura de los editores. Esto obviamente no lo soportaba, mandaba al carajo a sus censores, por lo que hizo trabajos duros y pesados para mantenerse y seguir dibujando y escribiendo, una vida para el arte, las calles oscuras, las mujeres muy iluminadas.
Fue uno de los primeros integrante del movimiento de poetas "Hora Zero" publico una sola vez con ellos, luego solo muy pocos llegaron a leer sus poemas que dejaba en amarillos papeles (El aire húmedo y salino del callao le daba ese aspecto melancólico a sus pertenencias).
Si su poesía es además de llena de energia y nervio, de melancolía y ternura, de mugre y sangre a veces, sus cuentos tienen el poder de una patada en los huevos, de un escupitajo, de un deseo prohibido, de borrachos y putas bailando en las madrugadas, de niñas procaces y desgracias en el alma. Como escritor se nos abriría un mundo nuevo a todos los que desconocen su obra, obra que le origino su primer by pass, cuando en un desalojo, al llegar a su cuarto y ver en la calle todas sus cosas, saqueadas y destrozadas por sus vecinos, y ver sus creaciones perdidas y desperdigadas en las sucias calles, un dolor en el pecho lo atravesó de lado a lado y desde allí hasta su final, fue de mal en peor ese cansado corazón de guerrero otoñal. Una mala vez, su madre sin querer mando a la basura una caja con muchas hojas llenas de sus escritos y dibujos, esas cosas le fueron matando y esas cosas nos negaron conocer parte de su genio.
Era difícil no sentir muchas cosas diferentes al conocer a este hombre macerado en dolor y furia, esa masa de energia que gustaba rodearse de jóvenes porque sabía que los jóvenes aun tienen la chispa de la rebeldía y del valor por el cambio. Pero era difícil seguir el ritmo de un hombre que estaba harto de un país corrompido y amoral, que vio todo y sufrió todo, que lucho toda la vida y que aun debe retorcerse en su tumba ante toda esa injusticia que padeció.
Julio a veces parecía en su sabiduría y apariencia a un Diógenes acriollado cuyo perro fiel era la pobreza. Fue el maestro de muchos historietistas y hablo de esa generación underground, de esos que al igual que Julio decían lo que sentían y que en su arte denunciaban a esa sociedad que les toco vivir. Julio fue parte de innumerables fanzines y revistas, su legado esta desperdigado por toda la ciudad. Participo en Tiene Dientes, esa gran publicación nacional que jamás debió detenerse y que aun debería estar editándose, fue mentor de muchos artistas e inspiro a otros más a seguirlo en su búsqueda por la igualdad, la libertad y la justicia.
Fue cremado, para que sus cenizas se muevan y nutran la tierra, porque hombres como él jamás descansan ni su fuego de apaga.
04 12 2012
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